LA HISTORIA JAMÁS CONTADA.

LEONCIO vs. LOBEZNO
Ahora que ya conocemos su triunfo, hablar de la serie Leoncio no tiene ningún mérito, pero, ¿cómo llegó ese éxito? ¿cómo se convirtió Leoncio en el gran héroe que es? ¿cuál es la historia de su nacimiento?
Aunque pocos lo sepan Leoncio no es más que una copia de otro personaje más antiguo. La desaparecida casa de cómics, conocida irónicamente por la “casa de las ideas”, Marvel, creó allá por los años ochenta una serie de cómics basados en héroes dotados de prodigiosos poderes provocados por mutaciones espontaneas de su ADN. Uno de esos héroes era Lobezno. Asociado a un lobo por su aspecto peludo, el héroe de Marvel pasó sin pena ni gloria por la serie X-Men que tampoco fue demasiado exitosa que digamos. La “casa de las ideas” (malas ideas debió tener) cerró a principios de los noventa acuciada por las deudas y la pésima gestión editorial, creativa y económica. Sin embargo de la génesis de sus mutantes y de Lobezno nació la mayor casa editorial comiquera de la historia, la J. Fry. Como todos sabemos el gran éxito de la Fry, tal y como se la conoce, fue Leoncio. Este humano con superpoderes, cura instantánea, rehabilitación, aguante de cualquier dolor, casi inmortalidad, vida larga y tortuosa y torturada, se convirtió desde el principio en la gran baza de la casa que pronto empezó a diseñar y dibujar una serie sólo para él. Al principio Leo, como se le conoce o Hogan su verdadero nombre y con el que los entendidos le asocian, formaba parte de los Mutados, grupo heroico que luchaba contra el mal y contra la superstición que los consideraba poco menos que animales. Pero la personalidad de Hogan era tal y sus posibilidades tan grandes, se le podía dibujar un pasado y hasta un futuro sin fin, puesto que no envejece o no parece envejecer y no muere, que la Fry se lanzó a hacer una serie sólo de nuestro héroe.
Allí nos enteramos del duro pasado de Hogan, de la muerte de sus padres, del asesinato de su mujer, de su violenta venganza y de cómo, gracias a su poder de recuperación es sometido a una dura terapia que le convierte en una especie de híbrido de león y humano con una fabulosa melena, un característico rugido (copiado, no lo olvidemos de la Metro) y una garras que le salen de la nada y que son su arma más mortífera y feroz. Además Hogan es un rebelde, un hombre duro, solitario, silencioso, algo así como un nuevo Bogart. ¿Qué fue de Lobezno? ¿Quién lo recuerda? Nadie o casi nadie, sus aventuras son hoy desconocidas. Tal vez sobreviva Lobezno en el espíritu de Leoncio. Tal vez.
James Howlett, Logan
Para Jose Luis, creador de grandes éxitos.

1 comentario:

Julio Vegas dijo...

José Luis... ¡Pequeñoouuu!