WATCHMEN


Con toda seguridad este es el comic con el que me hubiera gustado comenzar la andadura de esta seccion. Sin embargo, su amplio conocimiento por partedel gran publico y la idea de que mas poder aportar que ya no se hubiera dicho con anterioridad, mehan hecho ir postergando este articulo hasta dia de hoy, que ya tenemos en nuestras pantallas a los ...


WATCHMEN


“EL COMEDIANTE HA MUERTO” Estas palabras cierran el primer número de esta serie de 12 episodios. Con uno de los personajes asesinado y lo que parece ser el comienzo de una investigación para encontrar al asesino. Pero esto es solo el comienzo, y lo que parece ser el inicio de una historia de novela negra más, se irá trasformando poco a poco no sólo en un paralelismo con la sociedad de la época (mediados de los 80), sino en la mejor novela gráfica sobre superhéroes de la historia. Y si alguien cree que puedo estar exagerando, me remito a sus dos premios Kirby, sus 7 Harvey, los 4 Eisner y,finalmente, el premio Hugo a la mejor obra en la categoría “Otras formas de expresión”, siendo el primer cómic en conseguir semejante galardón. Sin olvidar las palabras de la crítica, recibiendo elogios tanto de los medios especializados como de aquellos de divulgación general (hasta Stan Lee, el gran hombre de la Casa de las Ideas), declaró que era su “cómic favorito de todos los tiempos no publicado por Marvel”.
“WHO WATCHES THE WATCHMEN?” O “¿Quién vigila a los vigilantes?” es una pintada que aparece en diferentes lugares y repetidas ocasiones durante la historia, y que viene a resumir todo el sentido de la obra. Independientemente de las diferentes subtramas que confluyen hasta el (¿Inesperado?) desenlace, “Watchmen” es una denuncia de la corrupción que supone el poder absoluto. Apuntalada en esa otra gran obra que es “V de vendetta”, presenciaremos como los diferentes personajes no dejan de ser marionetas de sus propias relaciones, intereses y manipulaciones, dirigiéndolos a todos hacia un fin trágico que se intuye ya desde el primer capítulo. Así, “Watchmen” nos trae el apogeo y caída de los “vigilantes”, personas normales y corrientes, sin poderes (exceptuando al Dr. Manhattan), que se han autonombrado defensoras de la ley y el orden. Sin embargo, su status se verá alterado con el paso del tiempo, y de ser honrados como justicieros enmascarados, pasarán a ser perseguidos por el
gobierno, al considerar sus actuaciones fuera de lugar (exceptuando al fallecido Comediante y el ya mencionado Dr. Manhattan, ambos amparados por el Acta Keene de 1977). Únicamente Rorschach (llamado así por su mascara basada en el conocido test) continuará con sus ilegales actividades, y se erigirá como nexo de unión de sus antiguos compañeros al considerar que el asesinato del Comediante es una conspiración para acabar con los enmascarados, por lo que tratará de advertirlos a todos y conseguir su ayuda para descubrir quién tira de los hilos de un complot que a cada página se va volviendo más complejo y dirigido a un objetivo mayor y mucho más “peligroso”. Y este objetivo tiene mucho que ver con la situación social en la que se sitúa el cómic, en cierta medida paralela a su momento de publicación, mitad de los 80. Porque por aquellas fechas, el mundo vivía los últimos, pero no por ello menos importantes, coletazos de la Guerra Fría, ya que la amenaza de un holocausto nuclear era mayor que nunca. La bonanza tecnológica se mezclaba con el terror al "dedo sobre el botón rojo", mientras Reagan y Gorbachov copaban la atención televisiva junto con los documentales sobre el invierno nuclear.
En “Watchmen” esto también ocurre aunque con sutiles diferencias: el presidente norteamericano no es Reagan, sino Richard Nixon, quien disfruta de un quinto mandato gracias a la modificación de la 22ª Enmienda a la Constitución de los Estados Unidos, conseguida en parte por la victoria de los USA en la Guerra de Vietnam al contar con la participación del “casi celestial” y patriota, Dr. Manhattan. Sin embargo, que los EEUU cuenten con este “arma” tan poderosa no ha cejado el empeño de los soviéticos de convertirse en la primera potencia mundial, y por ello, al igual que ocurría en la realidad, avanzan en la invasión de Afganistán, lo que no hace sino acrecentar el miedo a una guerra atómica total. Y esta posibilidad se volverá aún más real con la desaparición del Dr. Manhattan, lo que dejará al Departamento de Defensa de los Estados Unidos en una situación desconocida desde 1959 y al mundo, al borde de la confrontación bélica más temida desde el bombardeo de Hiroshima y Nagasaki. En este contexto se tendrán que mover Rorschach y el resto de héroes (Búho Nocturno, Espectro de Seda y Ozimandias), en una carrera contrarreloj para desenmascarar a la mano oculta que lleva manipulando a unos y otros en beneficio propio desde más tiempo del que habían sospechado inicialmente. Y esto es solo el argumento general, porque “Watchmen” tiene tantas lecturas, referencias y detalles que me faltan páginas para comentarlos todos. Por eso comprad el cómic, leedlo y me contáis ¡Mientras, nos vemos en 30 días!.... Bamf!!!


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